Una pulidora para autos es una herramienta eléctrica que se utiliza para pulir la pintura de un automóvil, eliminando rasguños, manchas y oxidación para restaurar el brillo original del acabado. La máquina utiliza un disco de pulido que gira a alta velocidad y puede estar equipada con diferentes tipos de almohadillas de pulido y compuestos de pulido para diferentes grados de abrasión. La pulidora para autos es una herramienta útil para mejorar el aspecto de la pintura del automóvil y es utilizada por muchos propietarios de automóviles y profesionales de la industria automotriz.
Básicamente, una pulidora está compuesta de tres partes, que es menester reconocer para objeto de mantenimiento y aseo.
De ahí que, un diseño de herramienta tiene en cuenta los siguientes componentes, a saber:
Mango: de características ergonómicas, es la pieza clave de la pulidora dado que lleva incorporada el comando de activación de la pulidora; el mango debe ser de material no eléctrico ni conductor, dado que en él se realizan las operaciones de movimiento por parte de la mano humana.
Carcasa: es una de las piezas metálicas de la herramienta: tiene un embonado, colector de residuo y las escobillas intercambiables; así mismo, el mango lleva incorporado el rotor del cabezal, dispuesto éste de una o varias velocidades, dependiendo de la pulidora.
Disco: abrasivo, rotatorio y de distintas gradaciones que dependen de la necesidad de pulido, es el insumo principal de la pulidora; se recomienda elegir el disco de acuerdo al grano con el que pretende realizarse la labor: los altamente abrasivos son útiles para trabajo industrial, por ejemplo.
Cable flexible: de tres conductores (activo, neutro y de protección a tierra) debe estar aislado para evitar fisuras y desgastes, además de contar con una clavija y un enchufe.
Tipos de pulidora: Eléctrica, Inalámbrica y Neumática
Existen varios tipos de pulidoras, cada una con sus propias características y usos específicos. Aquí hay algunos de los tipos más comunes de pulidoras:
Pulidoras rotativas: son las más comunes y utilizadas para la mayoría de las aplicaciones de pulido. Tienen un disco que gira en un patrón circular y es muy efectivo en la eliminación de defectos de la pintura, pero también son más difíciles de controlar.
Pulidoras orbitales: tienen un movimiento circular aleatorio y se utilizan para aplicaciones más suaves, como la eliminación de marcas de remolino, y son más fáciles de controlar que las rotativas.
Pulidoras duales: también conocidas como pulidoras de acción dual, combinan las características de las pulidoras rotativas y orbitales en una sola herramienta, lo que les permite ser efectivas en la eliminación de defectos más grandes y, al mismo tiempo, ser más fáciles de controlar.
Pulidoras de aire comprimido: utilizan aire comprimido en lugar de electricidad para hacer girar el disco de pulido y son comúnmente utilizadas en talleres de carrocería.
Pulidoras de mano: son pequeñas y portátiles y se utilizan para trabajos de pulido en áreas de difícil acceso.
Las pulidoras son herramientas eléctricas cuya versatilidad es importante para pulir salientes o bordes, así como soltar remaches, redondear ángulos, cortar metales, etc. Por ello, la industria las requiere de manera permanente para varios procesos en los que involucre bruñido, afilado o bordeado de superficies.
Básicamente, una pulidora está compuesta de tres partes, que es menester reconocer para objeto de mantenimiento y aseo. De ahí que, un diseño de herramienta tiene en cuenta los siguientes componentes, a saber:
Mango: de características ergonómicas, es la pieza clave de la pulidora dado que lleva incorporada el comando de activación de la pulidora; el mango debe ser de material no eléctrico ni conductor, dado que en él se realizan las operaciones de movimiento por parte de la mano humana.
Carcasa: es una de las piezas metálicas de la herramienta: tiene un embonado, colector de residuo y las escobillas intercambiables; así mismo, el mango lleva incorporado el rotor del cabezal, dispuesto éste de una o varias velocidades, dependiendo de la pulidora.
Disco: abrasivo, rotatorio y de distintas gradaciones que dependen de la necesidad de pulido, es el insumo principal de la pulidora; se recomienda elegir el disco de acuerdo al grano con el que pretende realizarse la labor: los altamente abrasivos son útiles para trabajo industrial, por ejemplo.
Cable flexible: de tres conductores (activo, neutro y de protección a tierra) debe estar aislado para evitar fisuras y desgastes, además de contar con una clavija y un enchufe.
Tipos de pulidora:
Eléctrica, Inalámbrica y Neumática
Te dejamos un video explicativo del uso correcto de una pulidora de autos
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